Mediante los textiles y la metalurgia -Amparo Joyería Textil- busca transmitir la historia y la cultura de los pueblos originarios de nuestro país. Además de poner en contacto a quien utilice las piezas con un relato de la historia, busca generar una experiencia de singularización. Como las etnias de nuestro país se inventaron a sí mismas, nosotros conformamos nuestra subjetividad tomando elementos de nuestra cultura.
Para los aborígenes, tanto el textil como la metalurgia, no eran solo piezas ornamentales. Los metales poseían carga simbólica muy grande, servían de conexión con fuerzas naturales, eran indicadores de rango social, posibilitaban la comunicación con personas no humanas, etc. El textil, por su parte, fue un registro histórico muy valioso, en ellos quedaron retratadas las enseñanzas de generación a generación, cambios sociales, culturales y ambientales de suma importancia.
Deseamos que la persona que utilice las piezas de joyería se reencuentre con los valores de las culturas originarias y su cosmovisión. Proponemos un proceso de singularización, incorporando valores como la naturaleza, sus raíces, el cuerpo, la intuición y las emociones en sus vidas cotidianas; otorgando valor ritual y ceremonial de transformación para que no se conviertan en una mera anécdota.
Los pueblos originarios y su vínculo con la naturaleza, tanto ambiental como humana, nos invitan e inspiran a repensar nuestros hábitos. En relación con las tecnologías y materiales, es que dichos pueblos, nos enseñan toda una tradición de teñidos naturales, hilados y trabajo artesanal. Desde el diseño hacemos una apuesta a la producción artesanal, fomentando los espacios compartidos de enseñanza y aprendizaje.
A partir de la noción de identidad planteamos la necesidad de evitar los estereotipos que vacían de sentido a los hechos, convirtiéndolos en puro exotismo. La forma de vestir, los tejidos típicos, las ceremonias, etc. es lo que vemos en la superficie, y es por donde podemos comenzar nuestro relato, pero lo que nos importa traer aquí son los valores.
No sigas las huellas de los antiguos;
busca lo que ellos buscaron.
Matsuo Basho